2a. Parte Testimonio de KS o la sierva de Jesucristo
Ella recuerda de manera especial una ocasión en que no había tenido ventas en la tiendecita que había puesto para el sustento de su familia pues recién se habían mudado por lo que no tenía para darles de comer a sus hijos, y se pasó esa mañana diciéndole al Señor "no sé dónde está la comida de mis hijos, pero Tú lo sabes" y al mediodía llegó una hermana de su congregación y al ver la estufa apagada, le entregó una suma de dinero con la que pudo alimentar su familia. Esa misma noche, varios hermanos de su iglesia le llevaron una compra tan abundante que no encontraba donde ponerla. Por eso debemos hacer como nos aconseja el salmista en Salmo 27:14: " Pon tu esperanza en el Señor; cobra ánimo; sí, pon tu esperanza en el Señor"
Una de sus hijas enviudó cuando tenía 40 años quedándose con un niño de 2 años y otros dos más grandecitos; seis meses después esta joven madre viuda empezó a padecer algunos problemas de salud sin que los médicos encontraran las razones que lo provocaban, al poco tiempo fue diagnosticada con un cáncer terminal que no le permitiría vivir más de 3 meses según el diagnóstico médico.
Según nos cuenta su madre, en ese momento pensó que se iba a desplomar al tener que enfrentar una realidad tan triste para su hija, por lo que en ese momento clamó al Señor por ayuda y El la fortaleció, permitiéndole testificar delante del médico que "el Dios a Quien le sirvo y a Quien mi hija también le sirve, levantó un muerto de 4 días" para expresarle su confianza en que Dios las ayudaría en medio de esa prueba. Vinieron tiempos difíciles de tratamientos, médicos, pero Dios le extendió la vida a su hija por 10 años más, por lo que el médico la bautizó como "Milagro de Dios".
Esta madre nos cuenta como su hija iba aún en medio de su enfermedad iba a los hospitales a predicar y nunca dejó de alabar al Señor con gozo ni de servirle.
Cuando la enfermedad regresó y ya su cuerpo no podía más, al esperar la ambulancia que la trasladaría al hospital, esta hija enferma pidió a quienes estaban con ella que tuvieran un tiempo de oración para alabar y dar gracias al Señor por el tiempo que le había extendido sobre esta tierra porque ella sabía que no volvía más a su casa.
Su madre nos dice que el día que su hija partió con Jesucristo, en medio de su dolor pudo darle "gracias a Dios por habérmela dejado por 50 años" y que hoy ella sabe dónde está su hija, que está en la Presencia de Dios y que como no hay ningún otro sitio donde pueda estar mejor, eso trae gozo a su corazón de madre, porque tiene su esperanza en las palabras de Jesús "el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá"; así que en medio de las pruebas recuerda 1 Pedro 5:7: "Echando toda vuestra ansiedad sobre El, porque El tiene cuidado de vosotros"
Por eso concluye con estas palabras de esperanza diciéndonos a aquellas que venimos detrás de ella: "he tenido aflicción pero he tenido a mi Cristo, que me ha fortalecido y me ha ayudado (Salmo 71:5: " Porque tú, Señor, eres mi esperanza y mi seguridad desde mi juventud")."
También nos testifica que ha puesto su confianza en las promesas de Dios, Quien nos dice que Sus hijos no serán avergonzados, ni mendigarán pan pues ela ha visto Su Promesa cumplida en su vida, "todo lo que he necesitado lo ha suplido en mi vida; he visto la fidelidad de Dios a lo largo de mis años; he encontrado esperanza en las palabras de Jesús: "en el mundo tendréis aflicción, pero confiad yo he vencido al mundo" , por eso dice a las más jóvenes "confíen en Jesús, tengan su esperanza en El".
Sus puertas siempre están abiertas para todas aquellas que necesitan un consejo, oración, enseñanza o simplemente unos oídos que nos escuchen o unos hombros sobre los cuales llorar. No hay nada que le dé más gozo que servir al pueblo de Dios. Dejo atrás mi egoísmo y te puedo llevar donde ella para que seas tan bendecida como yo lo he sido.
Sus puertas siempre están abiertas para todas aquellas que necesitan un consejo, oración, enseñanza o simplemente unos oídos que nos escuchen o unos hombros sobre los cuales llorar. No hay nada que le dé más gozo que servir al pueblo de Dios. Dejo atrás mi egoísmo y te puedo llevar donde ella para que seas tan bendecida como yo lo he sido.
Algunos versículos que nos recomienda mantener frescos:
Isaías 40: 28-31 "...Él da esfuerzo al cansado y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas. Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; mas los que esperan en Jehová tendrán nuevas fuerzas, levantarán alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán."
Isaías 55:6-8: "¡Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano! Deje el impío su camino y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová,el cual tendrá de él misericordia, al Dios nuestro,el cual será amplio en perdonar. Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos ni vuestros caminos, mis caminos..."
Cristo nos dice en Apocalipsis 22:7: "¡Vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro"
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